Él y ella

"Con las ligeras alas del amor he saltado estos muros, pues no hay muralla de piedra que resista el asalto del amor, y el amor es capaz de lograr cuanto se proponga..." Calló durante unos instantes.

-¿Qué ocurre?- Dejó la pluma en el tintero y se giró hacia ella.

-Estaba pensando, perdóname.- Se dispuso a continuar la lectura pero fue interrumpida.

-¿Y en qué pensabas?- Continuó preguntando curioso.

-En la lectura.

Hizo otro amago de avanzar con la lectura, no fue interrumpida mediante palabras, tan solo con los ojos del duque puestos en ella con la esperanza de que sus miradas se cruzasen. Ella miró y él le devolvió con una sonrisa.

-¿Cuáles eran tus pensamientos?- Cerró el libro entre sus manos.

-Creo que es una acertada acepción del amor, como el autor tiene la desenvoltura de escoger de forma exquisita las palabras.

Miró hacia abajo, hacia la tapa del ejemplar, más tarde al duque, este asintió y la joven continuó su lectura.

-También pienso que es una buena descripción.

Cruzaron un par de miradas, unas leves sonrisas, y cada uno continuó con su labor.