Mi gran familia.

Tengo 18 años, estudio último curso y tengo la familia más ruidosa y tradicional que puedas imaginar. Cada reunión es una convención de persona hablando casi a gritos en un espacio reducido, en el que todos estamos muy unidos, de forma literal. Y es cierto, estamos muy unidos, demasiado a veces. Es complicado distinguir entre un abrazo y un intento de asfixia, y todos, todos nos enteramos de todo lo que pasa en la familia incluso antes de la persona a la que le ha pasado. Hacer algo en secreto es casi imposible en mi familia, por que la información va de unos a otros a una velocidad que ni te puedes imaginar.

Las reuniones familiares de algunos adolescentes suelen ser pequeñas, padres, abuelos, tíos y primos si tienes, en mi familia somos tantos que sería muy complicado mencionarlos a todos. Están mis padres, mis abuelos paternos, mis dos tíos abuelos, mis tres tíos y mis cinco primos; por parte de mi madre, mis abuelos maternos, mis tres tíos abuelos, mi proyiayiá, mis seis tíos, mis ocho primos pequeños y yo. Sin contar con los hijos de mis tíos abuelos, y sus hijos, y algunos, sus hijos también. En resumen, somos una familia muy grande, tal vez griten mucho, les guste montar fiestas clandestinas en sus jardines y busquen parejas a sus hijos y nietos, pero somos una gran familia.